sábado, 6 de julio de 2013

Ojitos "rojo cereza"

Cuando era niña, recuerdo haber oído el comentario de una tía en ocasión del nacimiento de su segunda hija, dijo algo como: "Cuando estaba embarazada, me antojé frutillas y mi niña nació con una frutilla en su ojito".   
Qué extraña imagen, una bebé con una fruta en el ojito!

Cultivando la profesión, descubrí que esta "frutilla" tiene un nombre, se llama hemangioma cutáneo y es una  neoplasia benigna frecuente, generalmente se ve en niñas y puede presentarse tanto en el nacimiento como posteriormente.


Figura 1. Hemangioma capilar periocular derecho

Durante mucho tiempo, las lesiones vasculares congénitas fueron denominadas con términos impropios, surgidos muchas veces de falsas creencias populares sobre ciertas ingestiones o emociones maternas durante el embarazo (el caso de mi tía). Así, algunos términos usados en la actualidad, como hemangioma “frutilla” o “cereza”, “mancha en salmón”, “mancha en vino de Oporto”, “beso del ángel” y “picadura de cigüeña”, derivan de esa falsa creencia.

El diagnóstico es clínico, se realiza con la observación simple. 

El tratamiento desde el punto de vista del oftalmólogo solamente se realiza en caso de riesgo de ambliopía (ojo flojo), astigmatismo inducido por las dimensiones del hemangioma o cuando las pestañas se vuelcan hacia adentro (entropión), ya que por lo general estas lesiones se autolimitan. 
Pasan por diferentes fases y luego regresionan. 
No obstante, cabe recalcar que el impacto psicológico en los padres y en el paciente (sobretodo en edad escolar) deben ser tomados en cuenta y explicar estos importantes aspectos a la hora de decidir la conducta a seguir.

Anteriormente, los casos que ameritaban eran tratados con corticoides con buenos resultados, sin embargo, éstos producían molestos efectos colaterales.  
En la última década,  por una casualidad fortuita, mientras se trataban estos efectos indeseados con propranolol, se descubrió que el hemangioma disminuía notable y rápidamente, así que ahora constituye el tratamiento de elección.  
Son necesarios un control previo de tipo cardiológico y de glicemia y la debida precaución en caso de problemas bronquiales (ejm. asma). 


Figura 2. b y c post tratamiento con propranol via oral

Los resultados son muy buenos.